1. ¿Una lesbiana reconvertida?


    Datte: 19/11/2020, Catégories: Première fois Hardcore, Masturbation Auteur: Rain1744, Source: xHamster

    ... recién terminados de cenar, agarré el bote de la nata y se lo eché en sus pezones. Pude succionar y lamer con gran pasión. La situación hizo que se estremeciera y le afloraran esas pequeñas rugosidades alrededor del pezón, algo que me excitó todavía más.
    
    Acto seguido, le quité la braguita y llegó el momento de la verdad. Escupí sobre mi pene, extendí la saliva y empecé a pasar mi polla por sus labios vaginales. Su cara era de expectación, cuando no pude resistir más, se la metí hasta el fondo. Ella jadeó con fuerza y se agarró a mí. Progresivamente empecé a incrementar la velocidad de mis embestidas. La follé con intensidad. No estaba acostumbrada a eso y tuvimos que parar un par de veces. Breves parones que rápidamente reiniciamos porque su coño estaba muy caliente. En mi polla empecé a notar sus flujos más personales, no paraba de jadear con una perra en celo. Misionero, la vaquera, el perrito... Pasamos por distintas posturas y ella seguía disfrutando. Su culo respingón me cegaba. Lo tenía muy esponjoso y no podía evitar darle cachetazos de vez en cuando. Intenté abrir la vía del ano, follarme ese culo hubiera sido épico. Pero se negó, me dijo que por ahí no estaba preparada. Pese a todo, no me importó demasiado.
    
    Y llegamos al momento delicado de la noche. En pleno éxtasis, le sonó el teléfono, era Anelise. Tuvimos que parar, aunque yo tenía una empalmada que no podía desaprovechar y seguí masturbándome. Jessica ...
    ... atendió el teléfono, no discutían pero la conversación era tensa. Noté su disgusto así que debía actuar. Empecé a pasar mi lengua por sus muslos en dirección a su coño. Se le abrieron los ojos como platos, intentó apartarme, pero no quería hacer ruido para que Anelise no sospechase nada. Finalmente, llegué y me lancé de cabeza a su clitoris. Lo tenía muy sensible y muy húmedo. Mi lengua hizo el resto. Jessica no se podía contener:
    
    "Estamos terminando la cena, cariño, enseguida vuelvaaaay, uf..."
    
    "Jessi, ¿estás bien? ¿Te pasa algo?
    
    "Sí, sí, estoy bien... Es que la salsa creo que me sentó ufff, aaaah, aaahh... Ayayaya"
    
    "¿Jessica?
    
    Me puse de pie y le planté mi polla erecta y caliente delante de su cara, no pudo reprimirse y empezó a mamar. Por varios momentos tuvo que apartar el teléfono para que Anelise no escuchase el ruido de la succión.
    
    Yo estaba demasiado excitado por la situación de la llamada y cuando casi se estaban despidiendo... Sucedió. Descargué una espesa corrida sobre su cara y salpiqué incluso su caro teléfono. Ella no pudo evitar un gemido de lujuria y repentinamente su cara cambió. Anelise le había colgado. Me insultó, pero se limpió la cara con sus dedos y se los chupó. Por tanto, no le había disgustado para nada. Acto seguido, terminó de limpiar mi polla con su lengua. No sé si le creé un problema o un alivio con Anelise. Lo que sí sé es que últimamente tiene muchas ganas de cenar conmigo. 
«123»